Pep Guardiola no se anduvo con rodeos tras la aplastante victoria del Manchester City sobre el Brighton, donde los ciudadanos se impusieron 4-0 en el AMEX Stadium. Aunque el marcador fue contundente, el técnico español no quedó satisfecho y dirigió su enojo hacia el joven extremo belga, Jeremy Doku, apenas sonó el pitido final.
Doku ingresó al terreno de juego en el minuto 78 en sustitución de Bernardo Silva, pero su breve participación no estuvo exenta de errores. Guardiola, visiblemente molesto, no dudó en hacerle saber a Doku su descontento, incluso ante los aficionados locales que abandonaban el estadio en la costa sur.
El entrenador del City, conocido por su exigencia y perfeccionismo, expresó su frustración por las pérdidas de balón del jugador belga en dos ocasiones durante su breve aparición en el campo. Tras un efímero abrazo con Doku, Guardiola no ocultó su enfado y levantó dos dedos, señalando las dos oportunidades desperdiciadas por el joven.
Esta no es la primera vez que Guardiola aprovecha el momento después de un partido para comunicar su opinión de manera directa a un miembro de su equipo. En el pasado, jugadores como Jack Grealish y Joshua Kimmich también han sido objeto de sus reprimendas tras encuentros destacados.
Guardiola no quedó satisfecho con la actuación de Jeremy Doku durante el partido del Manchester City contra Brighton.
El mes pasado, tras el empate sin goles del City con el Arsenal, uno de los principales contendientes por el título de la Premier League, Guardiola fue visto en una acalorada discusión con Grealish, quien también fue suplente en esa ocasión.
Cuando se le cuestionó sobre la elección de resolver estos problemas en el campo en lugar de hacerlo en el vestuario, Guardiola, con su característico sentido del humor, bromeó diciendo que su "ego" era el responsable de estos enfrentamientos.
